Grandes ideas para pequeños espacios

El ingenio y las buenas ideas son el capital más importante a la hora de rediseñar una vivienda. Por muy pequeña o nefasta que esta sea, todo tiene arreglo y cualquier espacio puede convertirse en el lugar donde desearás vivir para siempre. 

A menudo pasamos por alto el verdadero valor de nuestra casa y no nos damos cuenta de que tras las paredes mal colocadas o incluso al otro lado del yeso que recubre los muros se encuentran verdaderos tesoros ocultos, que pueden añadir un gran valor a nuestra propiedad.
Hoy les presentamos el particular diseño que se ha adoptado en un piso de 56 metros cuadrados donde se sustituyeron instalaciones, suelos y se reconfiguraron las habitaciones. Se tiraron paredes que separaban el vestíbulo del living a fin de abrir el departamento  y ganar mayor amplitud. Siguiendo la misma idea también se  optó por una abertura con sistema de puerta corrediza para comunicar el living y el dormitorio.
Empecemos el recorrido por esta guía practica de ideas para decorar espacios pequeños… ¿Listo? ¡Manos a la obra!

1. El uso de los recursos arquitectónicos

Nos damos cuenta que el principal elemento decorativo en este departamento es la pared de ladrillos que ha sido descubierta tras eliminar las capas de pintura y yeso que la cubrían. Ella junto al piso de parqué son los verdaderos héroes en de este living. Sobretodo teniendo en cuenta que al no disponer de un espacio amplio, utilizar los elementos arquitectónicos a modo de decoración pueden ser la clave  para una decoración eficiente. Además, la combinación de estos elementos con el uso del color blanco y los toques de color a través de los detalles consiguen completar el diseño de este interior.

2. La impronta de nuestra personalidad

Rápidamente nos damos cuenta que la pared de ladrillo encuentra su opuesto en la pared blanca de enfrente. Desde esta perspectiva podemos apreciar el vestíbulo y la cocina.
Ponemos el foco en la cocina que si bien es pequeña, está dotada con lo esencial para funcionar de maravilla. Toda la pared ha sido aprovechada convenientemente para colocar el almacenamiento y los electrodomésticos necesarios dejando libre el resto del espacio.
Sin duda, lo más importante al momento de elegir la decoración de nuestro hogar es tratar de reflejar  nuestra personalidad, nuestro carácter, nuestro gusto. Es por ello que en este caso, los muebles y los detalles han sido rescatados por los inquilinos en sus multiples viajes y las paredes han sido decoradas por ejemplo, con carteles polacos de los años 70 y 80.

3. El blanco para crear espacios más amplios

Una puerta corrediza separa el dormitorio del living.
Una vez en el dormitorio, reconocemos  que el blanco domina este pequeño espacio que se siente absolutamente amplio y luminoso. La zona de descanso es cálida, agradable y funcional. El escritorio colocado entre las dos puertas aprovecha el espacio disponible y sirve también como decoración en esta acogedora habitación.
Blanco, gris y negro son los tonos elegidos para decorar este relajado dormitorio de estilo ecléctico-industrial.

4. La importancia de los detalles

Desde el dormitorio accedemos al baño. El color blanco sigue aquí muy presente y el negro, añadido en los detalles, es el encargado de romper la homogeneidad y aportar el carácter necesario para que un espacio como este no se vea aburrido ni aséptico. Las cestas de fibras naturales crean el balance perfecto.
Atención a las luminarias y al espejo que en ambos casos incorporan el estilo vintage en este canchero y cómodo baño.

5. Una variedad armónica

Terminamos este corto pero fructífero recorrido de nuevo en el dormitorio. La última recomendación que debemos tener en mente cuando decoramos espacios pequeños es lograr armonía en los espacios. No es necesario sobrecargar ambientes con objetos decorativos, la idea es encontrar un balance que nos permita disfrutar de los espacios sin sacrificar buen gusto.
En líneas generales podemos afirmar que este piso une armoniosamente el interiorismo en blanco con un sutil estilo industrial y el carácter viajero de los dueños. ¡impecable!