Vestidores. Un espacio con detalles. Los principios básicos. Ayudas para pensar en su diseño. Los materiales. Secretos.
La
moda hace que cada vez sea mayor el número de prendas y que ocupen más
lugar en el vestidor. Al acumularse la ropa, es necesario contar con un
espacio especial para guardar todo, que además resulte decorativo y
funcional.
El vestidor es un clásico de la decoración del hogar, pero no siempre
es bien considerado ni utilizado. Por ese motivo, Acosta Muebles te muestra los aspectos básicos a tener en cuenta al momento
de su diseño.
Ideas básicas
Es esencial conocer el espacio del que se dispone, cuántas personas lo utilizarán y el tipo de prendas a guardar.
Básico: contar con un sector de cajones y espacio para colgar la
ropa. “Para cajones, hoy el mercado dispone de organizadores que
permiten mantener cada prenda sin arrugarse”.
Especialistas consultados coinciden en que debe haber un espacio para
los zapatos. Sin duda que poder guardarlos en la caja original es lo
más conveniente, ya que así quedan protegidos del polvo.
“No puede faltar el espejo . Con una
buena iluminación, ayuda a seleccionar la prenda. Si no hay espacio
suficiente para un espejo con montura propia, se puede instalar en la
puerta: es muy práctico para aprovechar el lugar al máximo”.
Los segmentos
Una vez determinados los puntos básicos, se pueden proyectar los diferentes segmentos:
· Espacio promedio. Para las camisas y trajes en perchas bastan unos
110 cm de alto. En tanto, pantalones y polleras largas en perchas ocupan
120 cm de alto (estirados).
· Suéteres y chombas. Se aconseja guardarlos apilados en repisas
extraíbles colocadas con una separación de unos 30 cm de altura, o en
cajones con unos 40 cm de ancho y 22 de alto.
· Complementos. Está bien situarlos en cajones o bandejas de 10 o 20 cm de fondo.
· Zapatos. Se sugieren módulos con bandejas de 35 a 40 cm de alto y separados de la ropa.
Algunas ideas de diseño
Para un vestidor básico es suficiente un espacio de dos metros de
ancho y 0,55 m de profundidad. Hay variedad de materiales y precios a
gusto, que se adaptan al bolsillo del consumidor.
· La forma puede ser en “U” o “L”. Esta última aprovecha los
rincones, genera buen espacio de guardado y hace posible a las personas
desplazarse y vestirse cómodamente.
· Materiales. Hay múltiples posibilidades: madera maciza o placas
enchapadas, frecuentemente utilizadas en estos equipamientos. La
melanina actual ofrece diferentes texturas y acabados elegantes y más
económicos que las maderas macizas.
· Puertas. Los expertos recomiendan las puertas que se pliegan, ya
que brindan un panorama más amplio de la vestimenta. Sin embargo, las
corredizas son las más utilizadas, por una cuestión de espacio. Para las
de apertura tradicional hay que disponer de un espacio de 70 u 80
centímetros.
Finalmente, hay que apuntar que hoy muchos eligen dejar la ropa a la vista y se prescinde de cualquier puerta.
Detalles y secretos
• Colocar un buen espejo de cuerpo entero. Si son varios, mejora la perspectiva.
• Abrigos y vestidos: ubicarlos en los lugares más largos.
• Los cajones compartimentados son útiles para guardar los cinturones y pañuelos.
• El piso alfombrado es el ideal para un vestidor; también puede ser
piso flotante. Ambos brindan confort para desplazarse sin calzado.
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